La Unidad Educativa Municipal “Antonio José de Sucre” tiene una historia de más de un siglo que ha trascendido en el ámbito educativo. De numerosos documentos referentes a su historia podemos dar a conocer las siguientes referencias.

A partir de 1894 se abrió el establecimiento a la orden de la municipalidad con la concurrencia de 260 estudiantes varones bajo la dirección del señor institutor Roberto Cruz, funcionando en una casa adquirida por el Municipio ubicada en las calles Olmedo y Montúfar. Se llamó “Escuela Sucre”.

Desde el punto de vista de la infraestructura, el establecimiento funcionó en varios edificios pertenecientes a la Municipalidad y de personas particulares; por ejemplo en el Yavirac, en la casa del Sr. Rafael Delgado ubicada en la calle Olmedo y Cevallos; en la calle Espejo en el antiguo Banco de la Previsora, en la casa de Don Manuel.

En los años 1934-1935 se crea en el establecimiento la sección Pre-Profesional en el cual se formaba a los estudiantes en el aprendizaje de técnicas manuales. Más tarde por el año 1960, esta sección se convertiría en el Colegio Técnico Industrial Municipal “Sucre”.

El Municipio de Quito con el afán de atender a las necesidades del pueblo decide crear en 1960 la sección femenina, prestando sus servicios en forma separada a hombres y mujeres. A partir del año lectivo 1987-1988 se unen las dos secciones y empieza a funcionar como escuela mixta.

Considerando la labor y prestigio basado en el trabajo fructífero, el Ministerio de Educación Pública, mediante resolución N°. 356 del 26 de marzo de 1961 declaró a la Escuela Municipal “Sucre” como CENTRO EXPERIMENTAL. 

En 1998 la Dra. Patricia Bravo (Directora), Lic. Marlene Vega (Subdirectora), e integrantes de la Comisión de Investigación y Experimentación formulan el proyecto de creación del primer año de educación básica que se convertiría en el inicio de la esperada unidad educativa.

Mediante resolución N°. 0211 del 20 de febrero del 2001 se autoriza la creación y funcionamiento del octavo año de educación Básica; en el año lectivo 2000-2001 y progresivamente el noveno y décimo año de educación general básica.

En el año 2002 se crea el proyecto de la unidad educativa debido a la alta demanda de la comunidad educativa, en años posteriores como: 2005-2006, se ofrece a la sociedad la primera promoción de bachilleres en sus dos especialidades: Ciencias Exactas y Naturales, Ciencias Económicas y Sociales

A partir de mayo del 2003 y mediante resolución administrativa emitida por el Municipio del Distrito Metropolitano de Quito, se transfiere la Unidad Educativa a Distancia manejada por el ICAM-Quito a la UEMES, cuya labor está direccionada a los sectores más necesitados, que pertenecen al sector laboral y ocupacional del Distrito Metropolitano y la edad promedio comprende entre 16 y 35 años, ofertando los Bachilleratos en Comercio y Administración, Sociales y Bachillerato General Unificado.

La Unidad Educativa Experimental “Antonio José de Sucre” tiene como fin la formación integral e integrada de niños, niñas, adolescentes, jóvenes y adultos con equidad y pertinencia en el contexto del respeto sin exclusión ni discriminación, con oportunidades para todos y todas, en el marco del Buen Vivir y el enfoque en Derechos.

En la actualidad, es la institución municipal del Distrito Metropolitano de Quito con mayor número de estudiantes y que dispone de las modalidades presencial en la jornada matutina y vespertina con 2689 estudiantes (Campus Centro), Semi-presencial con 456 estudiantes ( Campus Centro y Sur ) y Eduación Básica Superior Extraordinaria (CBA) con 143 estudiantes ( Campus Sur ); la Sucre también cuenta con 131 docentes calificados y 25 personas en el campo administrativo.

En sus 128 años de trayectoria educativa ha rebasado fronteras a través de la participación exitosa de la comunidad de aprendizaje, resaltando los premios y trofeos obtenidos en concursos de índole educativo, cultural y deportivo.

La UEMS considera a los Padres de Familia como apoyo permanente dentro de la Gestión de Convivencia Educativa, que ejecuta la Institución y cuenta con profesionales de amplia trayectoria y experiencia, que son los encargados de acompañar y facilitar el proceso de enseñanza para propiciar situaciones que favorecen la elaboración de nuevos saberes y destrezas generando un trabajo responsable y visionario; formando así mucho más que una institución, una familia de excelencia.